Bebamos de nuestros cuerpos, quitemos la sed de sabiduría.

miércoles, 9 de septiembre de 2015



Está lloviendo en la ciudad; La gente le teme a la lluvia más que a la soledad.
Y teme escuchar al otro, por miedo a involucrarse con un nuevo despertar.
Todos miran al suelo, los edificios forman una cúpula solitaria.
La densidad de sentir la mirada del otro, no existe, se desvaneció con el miedo a expresarse.
Sólo espero un futuro de abrazos sin siquiera tener que pensarte
en donde pueda reir, verte y gozarte

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